El mercado informal de divisas en Cuba registró este jueves 5 de junio una leve variación que ha despertado el interés de los observadores económicos. El dólar estadounidense subió hasta los 373 pesos cubanos (CUP), tres más que el valor estable que había mantenido desde el pasado 3 de mayo. Esta alza contrasta con la caída de la Moneda Libremente Convertible (MLC), que bajó de 265 a 260 CUP. El euro mantuvo su cotización de 395 CUP, alcanzada la semana anterior.

Los cambios en estas tasas de cambio reflejan un entorno volátil y atento a factores externos. La mediana de valores recogida este jueves por el observatorio independiente elTOQUE sitúa el precio de venta del dólar en 375 CUP y del euro en 400 CUP, cerca de sus máximos históricos. Aunque los movimientos no son abruptos, se percibe una inestabilidad creciente en el mercado, alimentada por factores especulativos y por la tensión política en la isla.

La MLC, que continúa siendo utilizada en tiendas estatales especializadas, es cada vez más cuestionada por su utilidad y su persistente oscilación entre los 260 y 265 CUP. Muchos consideran que su eliminación es cuestión de tiempo, aunque por ahora se mantiene en circulación con valor incierto.

A pesar del llamado tarifazo de ETECSA, que impone restricciones a las recargas móviles en pesos cubanos y nuevos servicios dolarizados, el mercado de divisas no ha mostrado reacciones sostenidas. La subida inmediata del dólar a 372 CUP luego del anuncio fue transitoria y el tipo de cambio volvió rápidamente a su anterior estabilidad. Esta reacción sugiere que, aunque las medidas económicas tienen impacto, aún no han sido lo suficientemente fuertes como para sacudir el mercado informal.

Sin embargo, expertos advierten que esta aparente estabilidad podría ser frágil. Pavel Vidal, economista principal del Observatorio de Monedas y Finanzas de Cuba (OMFi), afirmó recientemente que el mercado es altamente volátil y responde con rapidez a cualquier evento político o especulativo.

El OMFi, mediante modelos econométricos e inteligencia artificial, asegura haber alcanzado un 94 % de precisión en la predicción de los movimientos del mercado. Recogen en tiempo real datos de redes sociales y plataformas digitales donde se realizan operaciones de compraventa. Esta herramienta ha permitido reducir la incertidumbre, en un contexto económico marcado por la escasez, la informalidad y la falta de referencias oficiales confiables.

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